Con más de medio siglo de vida, la CMIC es una Cámara empresarial sólida y con una amplia gama de afiliados que han dedicado una buena parte de su vida a engrandecer esta institución.
Los agremiados son mujeres y hombres que han aportado su conocimiento y entrega a hacer a la cámara cada día más sólida, pero sobre todo abonando a engrandecer a Yucatán.
Los afiliados con más de tres décadas de servicio a la industria de la construcción constituyen un valor incalculable para todos los integrantes de la gran familia CMIC, por ello, Constructiva platicó con algunos de ellos, quienes nos comentaron desde sus perspectivas cómo visualizan la industria en estos momentos, nos narran parte de su historia al servicio del sector, destacando la responsabilidad social e innovación que siempre ha distinguido al gremio constructor.
El ingeniero Vicente Narváez Moguel, que cuenta con 40 años de pertenencia a la CMIC, comentó que trabajar en la industria de la construcción es algo muy apasionante.
“Va más allá del interés que uno pueda tener. Nosotros como profesionales nos capacitamos muy a fondo, tenemos esa característica. Yo me acuesto con 100 problemas y me levanto con 200, pero todos los resolvemos. Así hemos logrado avanzar en todas nuestras obras.
Abundó que pertenecer a la CMIC le permitió ver los cambios en el sector, “Empezamos con personas con mayor experiencia que nosotros, pero fuimos aprendiendo de ellos, y aprendimos a competir, por ello entré a la CMIC, porque estábamos con nuestros similares y compartíamos nuestras experiencias y problemas.
“Siempre ha existido solidaridad y nos orientábamos entre todos. De todos los segmentos de la construcción, la gente que estaba antes que nosotros nos orientaba, esas es una de las grandes ventajas” Narváez Moguel cerró diciendo que la cámara “me ha permitido estar como tesorero, en tres periodos, secretario dos veces, y como en 7 comités a lo largo del tempo. Siempre lo he dicho: se viene a colaborar y ayudar e todo lo que se pueda”.
Por su parte, el exdirigente de la CMIC y socio con 37 de años de servicio en la industria de la Construcción, el Ingeniero Javier Ruiz Mendoza, destacó la institucionalidad y profesionalismo del personal de la CMIC, quienes se encargan del buen funcionamiento de ese organismo empresarial.
“La institucionalidad de los colaboradores de la Cámara es de suma importancia para el buen funcionamiento de este organismo empresarial, son personas entregadas a una institución. Tienen una filosofía muy clara y objetivos bien definidos para llevar a cabo en la Cámara de la Construcción. Eso da un gran valor porque la Cámara permanece. Los colaboradores de la cámara están comprometidos con ella”, apuntó.
Recordó cómo fue su incursión en la CMIC, casi al final de los años 80’s, “en esa época estábamos empezando. Me motivo afiliarme a la CMIC para estar en contacto con personas conocedoras de la industria, estar en contacto con colegas, con los que pudiera compartir experiencias. Además de pertenecer a un organismo que pudiera ayudarme y sobre todo estas afiliado a un organismo gremial. Poder intercambiar nuestras experiencias. Lo que vivíamos día a día en la construcción”.
El experimentado y reconocido socio CMIC, recordó que actualmente la CMIC debe enfrentar una transición muy importante en la que hay cambios sustantivos: “En estos momentos, la principal actividad esta en lado de la iniciativa privada, muy diferente a la de hace años cuando la actividad estaba en lado de la inversión pública, ese es uno de los temas de mucha importancia. La CMIC debe ahondar sus servicios hacia esta nueva fórmula de gestión y representación hacia los constructores que están en el ámbito de la iniciativa privada. Hay que exponer los servicios de nuestra Cámara hacia esos constructores”.
Sobre la Expo Construcción, Ruiz Mendoza, recordó que es una experiencia muy grata, puesto que le tocó ser parte de la organización de la segunda edición que se realizó en el año de 1999, “fue una idea que empezó el año anterior, que arrancó en el año 1998. Nos tocó iniciar la primera en el Centro de Convenciones Yucatán Siglo XXI, fue la primera que se inició en ese recinto. Es ahí donde se desarrolla la segunda expo construcción y que hasta la fecha ha sido muy exitosa. Además de las promociones y cuestiones técnicas e innovación en el sector”.
Con 40 años de afiliado, el Maestro en Valuación Inmobiliaria, Industrial y de Bienes Nacionales Carlos Castellanos Peraza, egresado del Instituto Tecnológico de la Construcción, narró que en 1983 era obligatorio asociarse a la CMIC cuando se hacía obra pública, y aunque él en sí no hacía ese tipo de obra, si le daba mantenimiento a los hospitales del IMSS.Eso lo llevo a integrarse a la cámara.
“Pero a raíz que me afilie, siempre he estado activo ocupando varias carteras. Con el tiempo, dejó de ser una obligación para mi pertenecer a la Cámara. Le ha dado a mi empresa imagen y presencia”.
Castellanos Peraza señala que la CMIC impacta con su trabajo a varios aspectos que muchos afiliados desconocen. “Hemos participado en la creación de la Ley Obra Pública Federal, junto a senadores y diputados federales, desde Yucatán participamos varios aportando a esa Ley Federal. También ayudamos a homologar la Ley Estatal, hemos participado mucho en cuestiones como la del Seguro Social. Ese es un logro para todos los constructores, no solo para la CMIC. Son logros para todo el gremio”, destacó.
Participar de esa manera le ha permitido devolverle a la sociedad algunas beneficios que le ha dado, como los estudios y su profesión de Ingeniero Industrial en Mecánica. “Insisto, es una gran institución. Por ello, es un gran orgullo seguir perteneciendo a la CMIC ya casi 40 años”.
Concluyó con un mensaje a todos los constructores: “Unidos somos más fuertes como sector, por ello, invito a todos los constructores a formar parte de la cámara, ya pasó la época de ser mártires, todos unidos podemos alzar la voz”.
Ing Eduardo Luna Montero says
Felicitaciones a nuestros compañeros de la cmic Yucatán por su testimonio